¡¡Ha vuelto Lucas Pope!!. Ese tipo que nos hizo jugar a ser jefes de una aduana de inmigrantes de un país completamente ficticio, que nos metió en la piel de el jefe de un periódico perteneciente a un país completamente ficticio ha presentado (entre hoy y ayer) un primer test jugable de su nuevo trabajo. Soy fan de los juegos indie y después de disfrutar de unas cuantas obras de este tipo a lo largo del año pasado, no he dudado ni un segundo en descargarme este primer contacto.
Pope es un desarrollador independiente de videojuegos cuyas obras se centran sobre todo en criticas políticas y sociales. Su primer trabajo, The Republia Times se centraba en el control y la censura de la información en el periodismo o en la manipulación de los medios de comunicación sobre la masa (también llamado pueblo), tiene una sencillisima jugabilidad, un ritmo bastante rápido y es gratuito. Lo podéis jugar aquí.
Su juego mas conocido, odiado por muchos y amado por otros tantos es Papers, Please. En la piel de un encargado recién llegado de las aduanas de inmigración de un país totalmente ficticio tendremos que controlar todos y cada uno de los pasaportes que entren y salgan de nuestro puesto. A primera vista parece bastante aburrido, pero Pope trasmite la historia mediante una jugabilidad realmente espectacular (y también bastante sencilla). Si eres de los que piensa que los videojuegos son únicamente tipos con armas gigantes, en mundos gigantes y con grandes objetivos entonces Papers, Please no es tu juego. Si quieres echarle un ojo, puedes encontrarlo en Steam por nueve euros.
De primeras, lo mas curioso de este juego, nada mas verlo es que sea una obra tan diferente a lo que nos tiene acostumbrados Pope, aquí abandonamos todo contenido político o social y nos encontramos en la cubierta del Obra Dinn, un barco completamente abandonado, cuya tripulación desapareció misteriosamente una vez llegado a puerto. Todo un misterio, al que nosotros los jugadores tendremos que enfrentarnos.
Su ambientación es espectacular, con un curioso juego entre negro y blanco y unos gráficos rellenos de pixeles nos sumergimos en el misterioso Obra Dinn de forma irremediable. La sensación de que somos lo único andante que hay ahí, en el barco, no hace mas que aumentar gracias a unos sonido ambiental muy bien realizado (es por ello que lo recomiendo jugar con cascos).
Y para rematar, la jugabilidad sabe conectar perfectamente con la trama, ya que no utilizaremos ningún tipo de arma, solamente cierto dispositivo que nos ayudara a esclarecer el misterio de este barco fantasma.
Este primer contacto me ha dejado con muy buen sabor de boca. No he querido spoilear nada (por eso esta entrada es tan corta) echad un ojo aquí y dejaos llevar por el sonido del mar.....
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